Hablar del Jazz es tocar la puerta de uno de los episodios culturales más definitorios del sonido del siglo XX (y lo que va del XXI).
Hablar del Rock como hijo - al menos adoptivo - del ritmo sincopado, puede generar ciertas inquietudes cuando no franca incredulidad, aunque la historia de sus encuentros y afortunados cruces de camino es rica y bastante antigua.
Y más que encuentros aislados o casuales, se debe hablar de evolución de uno y otro género, que ha producido no pocos enriquecimientos mutuos , aunque el Jazz cronológicamente hablando nació en los mismos albores del S. XX y el Rock (o Rock & Roll en un principio) irrumpió a la mitad de dicha centuria.
Nuestra reflexión inicia pues, buscando erradicar el prejuicio que se ha tenido en algunos círculos tanto puristas de la síncopa , como alas radicales rocanroleras, en el sentido de que ambos géneros son una especie de caminos opuestos, senderos divergentes, ideologías musicales irreconciliables y estilos en ocasiones hasta antagónicos.
Nada mas lejos de la realidad.
Nada mas lejos de la música del s. XX.
De hecho ambos géneros pasaron por las mismas etapas que a la postre los convertirían en los máximos referentes de lo que hoy por hoy puede llamarse música popular.
Un inicio común : El Blues.
Ambos géneros se nutrieron de la misma raíz. El canto de los marginados en las enormes plantaciones algodoneras del sur de los Estados Unidos, el recuerdo por la tierra madre y ancestral, llamada Africa.
El Blues sigue siendo, a más de 100 años de su aparición, la piedra de toque fundacional de lo que posteriormente se conocería como música popular norteamericana del S. XX . Curiosamente tanto Jazz como Rock and Roll tuvieron su epicentro de origen en tierras del tío Sam. Aunque la raíz como hemos dicho debe buscarse en otro continente, tal vez siglos atrás.
Se dice que el orígen de todo es el éxodo forzoso de millones de negros hacia Europa y posteriormente hacia América, debido al comercio de esclavos. Este acontecimiento mayor en la vida de occidente, sembró raíces muy profundas en el ánimo de aquellas personas de raza negra que se convirtieron en esclavos, trayendo al nuevo mundo sus cantos ancestrales basados en el esquema de "llamada-respuesta" , éstos serían el vehículo de expresión de su sufrimiento, su esperanza fallida y la única forma de auto afirmación que conocieron.
Grupo de esclavos negros, trabajando en una plantación algodonera en el sur de los E.U. |
"Las canciones de trabajo - o Hollers- fueron digamos los primeros Blues Americanos. Estas canciones de llamada - respuesta, eran cantadas "a tempo" con la actividad manual: el líder llama una línea y los trabajadores gritan una frase que coincide, digamos, con la caída del martillo. Estas canciones están llenas de notas blue, las líneas frecuentemente son improvisadas y el tempo es entrecortado" Ron David. Jazz para principiantes. Longseller. Argentina 2002.
Al cantar los Blues, en el país opresor, se desarrolló un estílo de expresión de protesta y angustia velada. Por eso los Blues man - woman iniciales tenían que cantar - siendo discretos - con toda el alma , y así representar dignamente a los miles y miles de esclavos que unirían con ellos su voz pero sobre todo su sufrimiento.
De esta manera, la raíz africana permaneció profunda y fuerte, y mediante la comunión en la desgracia, se hizo cada vez más imprescindible el recordar el llamado de la madre tierra, de los tambores que reproducen los latidos de toda una raza y su anhelo de regresar al orígen. Ese anhelo fué el que dió lugar al Jazz y luego al Rock & Roll, ambos, hijos directos del Blues.
Ahí está su primer encuentro.
Les dejo este tema realizado por Charlie Watss (baterista de los Rolling Stones) y Jim Keltner en su proyecto de 1999 . Es un homenaje a Elvin Jones, baterista ícono del Jazz. Escuchen el sentimiento Africano como resuena, al despuntar el S. XXI y de la mano de un héroe rocanrolero , un Señor Rolling Stone!!!
Hasta la próxima!!