Count Five fue una banda que le tocó (como a muchas) tratar
de superar su propia medida de éxito, el estándar que ellos mismos se
impusieron con la clásica instantánea
“Psychotic Reaction” fue demasiado alto y
no consiguieron repetir la fórmula que los colocara como un grupo que
trascendía mas allá de un solo hit.
El disco y sencillo que se editara bajo un pequeño sello en
el año de 1966 llamado Double Shot, afincado en Los Ángeles California fue una
gran presentación de lo que en esos años era conocida como música de GARAGE, un
sub género en sí mismo que a la postre se etiquetaría como GARAGE-ROCK.
Psychotic Reaction fue nombrada como una de las canciones
que le dieron forma a lo que hoy conocemos como Rock, siendo seminal para
bandas y sonidos que vendrían en los años posteriores.
La arquitectura de las casas
en algunos suburbios de ciudades estadounidenses posibilitó que los
chicos con inquietudes musicales utilizaran las cocheras para reunirse por las
tardes o los sábados en la mañana y aprovechando el eco que generaba el espacio
cerrado, experimentar con la potencia en las guitarras, que pronto se volvió distorsión,
y que junto al uso del pedal fuzz, marcaba el sonido característico de los garages y el ansia juvenil contenida en ellos.
Ese pedal fuzz había alcanzado notoriedad internacional
gracias al No. 1 de julio de 1965 “Satisfaction” el himno Rollingstoniano por
excelencia y una de las máximas canciones del rock en toda su historia.
A partir de esa cumbre lograda por el sonido fuzz, cada vez
más se extendió su popularidad y las posibilidades de acompañar la energía
garagera crecieron exponencialmente, logrando un sonido característico que
conquistaba a miles de nuevas bandas surgidas bajo su sombra.
Una de esas bandas eran los SQUIRES, fundada en 1964 en San
José California, una región que sería especialmente prolífica en la generación
de sonidos frescos durante buena parte de los sesenta.
Integrada por John Michalski (guitarra principal) y Roy Chaney (bajo) sus miembros fundadores y complementada por Skip
Cordell (batería) , Kenn Ellner (como cantante y armónica) y Phil Evans
(teclados). Evans y Cordell salieron al
poco tiempo y sus lugares serían ocupados por
Butch Adkinson quien sería su nuevo baterista y por un chico inmigrante
irlandés de nombre John Byrne que a la postre se convertiría en el líder de la
banda y compositor principal.
Éste carismático muchacho llamó la atención de su vecino Ken
Ellner, quien como él, asistía a la escuela Pionner High School de San José. En
el patio de la escuela Byrne rasgaba su guitarra al compás de la famosa rola
“Señora Brown, tiene una hija adorable” que era un hit en ese momento
interpretada por el grupo Herman´s Hermits.
Ya como miembro de la banda Byrne influyó a Ellner para que
el nombre artístico fuese cambiado a Count Five (juego de palabras que bien
puede referirse a Cuenta de Cinco o bien a Los Cinco Condes) debido a su
afición a las novelas del Conde Drácula. El nombre trajo consigo el look que
los haría famosos, y la fotografía que los inmortalizaría, ya que decidieron
tomarse una foto promocional, ataviados cada uno con su respectiva capa de vampiro, frente a uno
de los edificios más emblemáticos de San José California: La casa misteriosa
Winchester, construida por la esposa del mismo William Wilt Winchester,
inventor del súper famoso rifle de repetición que ayudó a la conquista del
oeste estadounidense.
La famosa fotografía de Count Five frente a la casa Winchester, un lugar emblemático de San José California |
De ésta manera, ya con una imagen reconocible y con un
sonido más trabajado empiezan a presentarse en la escena local de San José,
donde por cierto, fueron compañeros y amigos de otras bandas representativas
del Garage californiano: The Syndicate of Sound, una banda muy curiosa y experimental llamada
The Chocolate Watchband y por si fuera poco The Golliwogs , quienes en un par
de años se convertirían en Creedence Clearwater Revival.
Cartel promocional de un concierto de Count Five en mayo de 1966, noten que Iron Butterfly también estaba en esa tocada |
Acompañaron y aprendieron de éstas bandas, ganaron presencia
escénica, por lo que el siguiente paso era buscar un sello para grabar su
música, la cual se componía por un primigenio sonido de urgencia juvenil con el
toque british, tan de moda por aquel entonces.
Pero la historia de ser rechazados una y otra vez por
diversas casas discográficas también alcanza a los Count Five, que como muchas bandas deben de
pasar por una interminable búsqueda que pone a prueba el temple, la consistencia y el amor al rock que debían
profesar si es que deseaban continuar en el camino de la música. Finalmente una pequeña disquera de nombre
Double Shot les dio la tan ansiada oportunidad.
La banda sonaba tan fresca y convincente, que se dice que el mismo presidente del sello discográfico estuvo presente durante la grabación. Una vez más, la experiencia que habían desarrollado al estar sobre un escenario, por modesto que fuera, posibilitó un sonido poderoso.
La banda incluso
había llegado a ser la responsable de abrir los conciertos del grupo
Them, en aquel entonces aún con Van Morrison al frente en la feria de Santa
Barbara, curiosamente en ese mismo cartel les tocó alternar con otro Morrison,
por entonces imberbe y desconocido cantante que se presentaba con su grupo
llamado The Doors y que eran también unos perfectos desconocidos.
Llegaron a frecuentar algunos clubes importantes del círculo
californiano como el Coconut Groove, El
Carousal Ballroom y el más famoso de
todos: el Fillmore West de San Francisco, donde muchos grupos y solistas se
consagraron en aquellos agitados años 60´s.
De igual forma alternaron con verdaderos "consagrados" como The Beach Boys, Martha an the Vandellas, The Byrds y The Dave Clark Five...
Y todo gracias a una sola canción.
A pesar de que el grupo no demeritaba en calidad y poco a
poco se hacían de un sonido propio, fueron un extraño caso en donde el éxito
rotundo y la posteridad rocanrolera se la deben a una sola canción, que como
golpe al rostro fue demoledora y auguraba una carrera llena de éxitos, un
sonido que se antojaba podía crecer hasta convertirse en una realidad más
amplia en aquellos tiempos previos al verano del amor.
Sin embargo el Count
Five se incendió y consumió solamente
con esa exitosa pero fatídica canción.
La Reacción Psicótica (Psychotic Reaction) fue himno
garagero en aquel 1966.
Su sonido poderoso desde los primeros compases, su
estructura sencilla, seca y salvaje, la guitarra fuzz, la forma en que los
instrumentos se incorporan en el ritmo de la melodía, todos estos elementos
convirtieron a Reacción Psicótica en una canción excepcional.
Alcanzando el casillero 5 en el Billboard estadounidense,
Reacción Psicótica fue compuesta dentro de un ensayo del grupo a inicios de 1965,
es pues en su origen una especie de jam session que servía para poner “ a tono” a los chicos ,
aunque no tenía letra.
Las palabras surgieron de la mente juvenil de John Byrne ,
el cual durante una clase de Psicología en el San José City College escuchó
murmurar a su amigo Ron Lamb el cual le dijo al oído “ ¿sabes cuál sería un
gran título para una banda? : Reacción Psicótica”
Byrne , esa misma tarde, en un ensayo, comentó el nombre y
posteriormente durante el trascurso de la sesión, iniciaron a darle forma a un
instrumental compuesto por toda la banda. En esa ocasión se menciona que el grupo completo le dio la forma final, en
cuanto a la pista básica. El uso de la harmónica como una especie de sirena
psicótica que anuncia una avalancha sónica se debió a que unos días antes Ken
Ellner había adquirido el diminuto instrumento y fue precisamente su sonido, el
que dio el tono sobre el cual se desarrollaría el jam instrumental.
Se dice que durante varios meses Count Five fue
recomponiendo la melodía, haciéndola más compleja y además interpretándola en
sus presentaciones en vivo, como un poderoso ejercicio instrumental,
anunciándola ante su público ya como Psychotic Reaction, aunque aún no se tenía
letra para el tema.
Todo el entramado musical había metamorfoseado en una
especie de rompecabezas psicodélico, que aglutinaba todo el poderío de los
instrumentos del grupo. Lucía ya la harmónica como telón de fondo, la guitarra
fuzz , la batería típicamente garagera, el bajo que sostenía todo el entramado
con sus sencillos pero poderosos acordes.
Así es que no debía fallar. Una letra ingeniosa sería la
cereza en éste pastel aderazado típicamente por el espíritu de 1966. John Byrne
cumplió y entregó una letra que hacía recordar en parte, las consignas de
frustración juvenil vertidas en Satisfaction, de los Stones.
El sentido de urgencia por vivir, la sensación de hastío en
un mundo que típicamente no comprende al adolescente rebelde, focalizado en una relación de amor fallida.
Todo listo para ser asimilado por millones de jóvenes mientras todo el cuerpo
se envolvía en una espesa y transportante melodía que preconizaba todo el
movimiento psicodélico que en ese 1966 tomaría forma y fuerza.
No podía ser mejor la combinación. Y después de una serie de
cambios, ajustes, sugerencias de fans, de amigos, de los mismos miembros de la
banda, de productores de otros sellos discográficos que los rechazaban
sistemáticamente, y aún después de que el productor de Double Shot, donde
finalmente se prensó el sencillo y el disco les hiciera la sugerencia del grito
que da parte al middle eight: And It
Feel Like This!!!
De ésta manera se redondeó una canción completa, llena de
los sesenta, llena del sonido de millones de garajes que a lo largo y ancho de
la Unión Américana, estaban dando forma a un nuevo estilo de hacer rock: seco,
directo, psicodélico y bailable.
Lista de los discos mas vendidos en el sur de California el 28 de septiembre de 1966, según una estación local |
La canción incluso llegó a ser covereada por Brenton Wood (recuerdan el exitazo "Gimme a Little Sign" - "Hazme una señal" aquí en México), debido a que Wood era el principal cantante solista de la disquera Double Shot.
El álbum con otras 11 canciones además de la canción que
también le dio nombre, apareció en ese mismo 1966.
Mostraba un mosaico poderoso
e imaginativo donde la harmónica de Ellner seguía siendo un llamado
omnipresente a los nuevos tiempos que ya habían llegado. Double Decker Bus es
prácticamente una calca en la estructura musical de Psychotic Reaction, después
tendrían todavía tiempo para dos covers a The Who: La infaltable y seminal “My
Generation” y el tema “Out in The
Street” ámbos cortes extraídos del álbum debut del combo inglés, aunque para ser sinceros, se quedan cortos en cuanto a fiereza en instrumentos y en voz al interpretar a los salvajes londinenses.
También aparecen muestras de pop exquisito con She´s Fine,
Power Rock descarnado y oscuro con “Pretty Big Mouth” con un omnipresente
sonido Fuzz, y la cara B del sencillo Psychotic Reaction: “They´re Gonna Get
You” que hacía recordar pasajes de locura juvenil con inflexiones de voz al
estilo de Napoleón XIV y su tema de ese mismo 66: “They´re Coming To Take Me
Away”
Desafortunadamente para la banda, el éxito completo debido a
una canción los condenó a buscar con poco éxito otra fórmula musical que
igualara o superara lo conseguido por “Reacción Psicótica”.
No lo consiguieron. Tal vez fue demasiado para unos
adolescentes que sintieron que ya habían dejado su huella indeleble en los
anales rockeros. Inexplicablemente fueron dejando de lado su vida musical y
regresaron a las aulas. Luego, el servicio militar, las presiones familiares y
una actitud francamente poco rebelde, hicieron que el grupo se desbandara
definitivamente a inicios de 1969. En esos años de franca experimentación,
madurez y crecimiento del rock, Count Five había encendido una mecha de un
cartucho de dinamita que ya no pudo ver estallar en toda su magnitud.
Sólo les alcanzó la energía para un par de EP, que saldrían
en 1967 y 1968.
Como dato curioso, la banda sirvió como inspiración al periodista, músico y crítico de rock Lester Bangs, el cual escribió un libro llamado
"Psychotic Reaction and Carburetor Dung"
En éste libro, Bangs contaba la historia del grupo, el cual había lanzado numerosos discos cada uno superando en creatividad y refinamiento artístico al anterior, trabajos que respondían a los nombres de "Carburetor Dung", "Cartesian Jetstream", "Ancient Lace and Wrought -Iron Railings", los cuales se inscribían dentro de las mejores obras de su tiempo.
Sobra decir que éstos discos nunca existieron y la banda nunca llegó a las alturas de un álbum conceptual como "Tommy" de The Who, o "Village Green Preservation Society" de The Kinks.
Curiosamente, Bangs declaró en algún momento que nunca fue fan de Count Five, incluso le llegaba a molestar la propuesta musical de la banda, y lo que escribió sobre ellos se aproximaba más a una sátira que a una crónica fantástica.
The Count Five entre 1967 y 1969 tuvieron cierta variedad musical y aproximaciones a la psicodelia con sus temas "Contrast" "Declaration of Independence" y sobre todo "Revelation in Slow Motion" donde se aprecia un sonido más sofisticado.
Sin embargo la banda logró entrar al Olimpo de los inmortales siempre al
ritmo del trepidante pedal fuzz y esa harmónica que tan bien musicalizaron
una clásica
Reacción Psicótica…